EXTRACTOS DE SABIDURÍA
Por José Trigueirinho Netto
Un instructor de la humanidad dijo, cierta vez, que no era fácil concretar el Plan Divino en la Tierra. Según él, a pesar del gran trabajo de las energías de los mundos suprafísicos, que se valen de todas las oportunidades posibles para irradiar hilos de luz a los planos materiales en beneficio de todos, los seres humanos acaban usando esos hilos en «remiendos caseros».
En la actual fase crítica de la Tierra sus habitantes viven pruebas y sufrimientos agudos; sin embargo, se les envía mucha luz a fin de ayudarlos a entrar en un nuevo estado de consciencia, que se está instalando rápidamente.
Así, aunque la inercia predomine en muchos y haya un gran desorden en todos los sectores de la vida externa, se produce también un dinámico despertar a la vida espiritual.
El contacto de la consciencia humana con la luz cósmica siempre ocurrió, aunque de un modo velado para la mayoría. En la etapa actual, un mayor número de personas puede alcanzar una compresión universal, encontrar esa luz dentro del propio ser y comenzar a expresarla.
En el presente despertar de la Tierra recibimos información, a través de la luz que nos llega a la consciencia, sobre civilizaciones suprafísicas existentes en otras dimensiones, eventualmente en mundos intraterrenos.
Entre esas civilizaciones, una de las más activas en los niveles internos del planeta, es la que se conoce con el nombre de Erks. Mencionada frecuentemente en obras referidas a la ciencia espiritual, se encuentra en una área subterránea y sutil de la provincia de Córdoba, en la Argentina. Desconocida para la mayoría, hace millares de años que interactúa silenciosamente, en el plano de las almas, con la humanidad de la superficie de la Tierra, para ayudarla en la gran crisis que ahora atraviesa. Erks se muestra a la percepción interna instruyendo, curando y canalizando las nuevas energías cósmicas que están transformando al planeta.
La ley evolutiva superior trata sobre el desarrollo espiritual, profundo, de quienes se disponen a transformaciones más amplias. Pero, para que esa ley actúe, hay que cultivar el desapego, lo que no quiere decir desprecio ni indiferencia. Como civilización espiritual, Erks nos revela el justo equilibrio para que el desapego no se torne desamor. Sede del conocimiento iniciático y del despertar de la consciencia divina, actúa también como una de las mayores bases de rescate de los habitantes de la Tierra en condiciones de ingresar en una vida interior, sincronizada con ritmos cósmicos.
Ante las informaciones sobre la gran transformación por la cual la Tierra ya está pasando y aún pasará, muchos están preocupados: «¿Cuándo van a cumplirse las profecías?» «¿Cuánto tiempo de vida aún me queda?» «¿Habré perdido oportunidades?» Esas preguntas representan al mundo externo y sus preocupaciones por cosas pasajeras. Pero lo que importa para la evolución superior no es el tiempo que pasa ni el tiempo que falta, ni tampoco el tiempo que ya pasó; lo que sí importa es el desarrollo del Espíritu.
La transición de la Tierra es, fundamentalmente, el paso de la ley material a la ley evolutiva superior. Los terremotos y las otras manifestaciones físicas suceden por añadidura, pero esto es de importancia secundaria para quienes se polarizan en los planos internos del ser.
La energía y la protección para que participemos de ese despertar provienen de Erks, se esparcen por toda la atmósfera terrena y llegan a cada ser en la medida de su apertura. El trabajo de Erks es silencioso, profundo, intenso y constante. Así como silenciosamente se manifestó a la humanidad, espera a los que deben cruzar sus portales para después retornar a la vida de la superficie terrestre, trayendo consigo las semillas de los tiempos venideros.
De la Serie Síntesis de Charlas de Trigueirinho
El Despertar de la Tierra
Irdin Editora